Conociendo rincones desconocidos: Chorreras de Miraflores de la Sierra (05-04-2022)

A cualquiera que nos guste la naturaleza hay que aprovechar siempre la primavera y más si llueve para contemplarla en todo su esplendor.

A pesar de mi cansancio me llamaba la curiosidad esta ruta, que no sé por qué nunca me había preocupado en buscar algo en esta localidad tan famosa y tan bien ubicada.

La verdad es que esta ruta no tiene mucho misterio, ya que al punto de partida se puede llegar en coche
tranquilamente y aparcar en él, y luego se sigue un camino perfectamente marcado, siendo necesario sólo salirse de él para acercarse a contemplar las chorreras que nos encontramos, con lo que con seguir las fotos es suficiente.

Salimos del área recreativa de la Fuente del Cura y tras un pequeño tramo ascendente con robles a la derecha y chalets a la izquierda, llegamos a un tramo más o menos sin desnivel sobre la falda de la montaña con vistas hacia Soto del Real y el embalse de Santillana.

A mano derecha hemos dejado un camino con una valla por el que luego regresaremos.
Avanzamos hasta llegar a otra barrera donde entraremos en una zona con vegetación a ambos lados.

Llegamos a una bifurcación donde cogeremos el camino ascendente de la derecha.
Empezamos una zona de zetas en ascenso, pero rápidamente nos salimos en una curva por un camino bien visible a mano izquierda, por el que vamos a dar a la primera zona de chorreras.

Nos acercamos cómodamente hasta ella y nos encontramos con un pequeño salto de agua agradable, aunque con un tronco de árbol un tanto molesto.

Bajamos también a ver algún salto de agua un poco más abajo, aunque esto luego requiere un buen esfuerzo para volver al camino, ya que es un tramo con bastante desnivel.
Deshacemos ese tramo hasta el camino principal y empezamos a ascender por esas zetas, siempre alejándonos hacia el oeste.

Después de un rato llegamos a una especie de explanada, y subiéndonos a unas piedras en el final de la misma, disfrutamos de unas grandes vistas también hacia el pantano de Santillana.

En breve llegamos a la zona más fecunda de las chorreras, donde a mano izquierda del camino podemos ver 3 o 4 saltos de agua interesantes, aunque luego cueste recuperar el camino por el desnivel, pero merece la pena, no tiene apenas dificultad.

Una vez de vuelta al camino, éste empieza a girar ya en sentido este, para ir retornando hacia el punto de partida.

Poco después nos cruzamos otra vez con el arroyo un poco más arriba, en un sitio que me pareció idílico para comer un buen bocadillo.

Una vez repuestas fuerzas seguimos camino adelante, sin apenas desnivel en esta zona y con una paz y una tranquilidad inmejorables.

Nuestro siguiente punto de referencia es una interesante fuente a mano derecha, con un claro al fondo.
En ese claro está la famosa formación de robles, casi concéntricos, que forman una estampa increíble.
Con el pequeño embalse que está en el ascenso a la Morcuera a nuestra izquierda, nosotros seguimos un poco de frente y al llegar a otra pradera contigua, tendremos que salir por nuestra derecha, donde hay un roble en el centro y un pilón, que marcan la salida del camino que tendremos que coger casi hasta el final.

Un camino que va descendiendo entre robles sin hojas de manera muy agradable, ya que ni tiene excesivo desnivel como otros caminos de montaña, ni excesivas piedras.
Ya casi al final del camino llegamos a una enorme y curiosa mole de piedra, penúltimo punto de referencia de la ruta, que poco después alcanza la barrera que dejamos casi al comienzo de la ruta y que pocos metros después llega a la fuente de inicio de nuestra ruta.